martes, 26 de septiembre de 2017

El único rumbo que se mantiene es la deriva

Capítulo 10 de "El agujero", un cuento de unas 30 páginas y de hace unos 24 años.
A veces este diálogo conmigo misma vuelve.

-10-

–Esto está soso, pásame la sal.

–A mí me gusta así. Supongo que porque no me puedo pasar con el sodio me hago a la idea de que de esta forma sabe mejor.

–Es lo mismo que lo mío con el azúcar; me he acostumbrado al café amargo y aunque a veces un poco de dulce lo corone de gloria en general no soporto que sea empalagoso.

–¿Sabes? No sé escribir.

–No importa, yo no sé leer.

–Y no sé dibujar.

–No importa, soy ciego.

–No puedo bailar.

–No importa, yo tengo amputados brazos y piernas.

–Parezco un grajo cantando.

-Yo estoy a punto de degollarme.

–¿Qué piensas de mí?

–¿Y qué piensas tú de mí?

"Porfavorporfavor, dime quién soy"
(Agenda marrón, 2015).

No hay comentarios:

Publicar un comentario